Marbenes

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Ésta soy yo, tenía un mal día...

La sangre de los inocentes, de Julia Navarro

“Matad, matad a todos, que luego Dios distinguirá a los suyos”.

Dispersa aunque bien reunida. Así definiría esta última novela de Julia Navarro, La sangre de los inocentes. Se está superando, lo que es de agradecer y conlleva mérito, pero sigue notándose (desde mi humilde punto de vista) que como escritora es aún novel.

“La sangre de los inocentes”, si no repite esa frase cien veces a lo largo de la novela es que no lo hace ninguna. Quizá, si la hubiese sustituido al menos en ocasiones por “la masacre injustificada”, “la matanza injusta de no culpables”, “la sangre vertida injustamente”, “la indigna exterminación de los justos”… no resultaría tan cargante.

A lo largo de sus setecientas y pico páginas (en la edición de bolsillo) aparecen términos y conceptos diferentes y mezclados tales como cruzadas, Santa Inquisición Española, templarios, cátaros, grial, manuscrito, II Guerra Mundial, nazis, excavaciones en busca de un tesoro que dotará de poder infinito a quien lo posea, problema de ocupación israelí en territorio jordano, organización terrorista islámica, emancipación de la mujer musulmana, E.T.A., reliquias de distintas religiones, servicio secreto de inteligencia israelí, gabinete de inteligencia del Vaticano, organización internacional de cooperación contra el terrorismo, conflicto serbio-bosnio, conspiración internacional ideada por una misteriosa organización que maneja los designios del mundo en la sombra…., creo que faltan las palabras códice y dragón, pero lo demás está todo. Un batiburrillo muy comercial sin duda.

Y, sin embargo, debo reconocer que, aunque quien mucho abarca poco aprieta, (me imagino a mí misma con una banda negra sobre los ojos como los alcohólicos anónimos que se confiesan públicamente) ¡me ha gustado! Es entretenida, incluso diría interesante y, a pesar del batiburrillo y la mezcla del “detodounpoco”, está bien estructurada y las historias individuales están bien enlazadas unas con otras a través de ocho siglos, desde que comienza la trama en el siglo XIII hasta que termina en el XXI, para formar la historia conjunta.

Ya he dicho al comentar otras novelas suyas que se nota que es periodista, mas que escritora. Pero como digo arriba, va mejorando. En la novela que nos ocupa se preocupa por unir la trama, dar forma a los personajes, y dar sentido al argumento y ambientarlo correctamente más que antes, que sólo parecía preocuparle que lo contado fuera impactante. Mas…, su lenguaje sigue siendo demasiado común, excesivamente cotidiano, sin esfuerzo retórico ni demasiado estilo. Esto tiene su parte buena pues llega a un espectro de público mucho más amplio, y su parte mala porque devalúa su trabajo literario. Como periodista seguro que sabe hacerlo mejor, pero en la carrera enseñan que hay que llegar al público, hacerle creíble la historia o al menos impactante, y ponérselo fácil; las virguerías sobran y el lenguaje culto también porque se pierden lectores, consumidores de información, y ésta es la única realmente importante.

Nos cuenta una fantástica fábula que comienza con el asedio a Montségur -donde se guarecían los últimos credentes de Francia- por parte del rey francés y la Santa Inquisición. Allí, un dominico llamado Fray Julián, persecutor de la herejía, notario del santo oficio, vive atemorizado porque sus propios hermanos descubran “su traición” y siente el alma atormentada, dividida entre lo que cree y lo que quiere creer, entre lo que tiene que hacer y lo que debe hacer, entre dos lealtades imposibles de abandonar pero enfrentadas. Este monje, en su angustia y por mandato de una perfecta que le domina porque a ella le debe lo que es, recoge en un escrito el sufrimiento de los cátaros y la injusticia cometida en nombre de Dios al darles caza y muerte. Él reza porque esta sangre vertida no sea vengada algún día, pero su mensaje se malinterpreta en la posteridad dando lugar a “la mayor conspiración de todos los tiempos”. De llegar a producirse, de tener éxito, estallaría la tan temida, porque sería la última de la especie humana, III Guerra Mundial.

Hilvanando bastante bien pasado y presente, da forma a la trama argumental. Nos cuenta cómo este manuscrito de fray Julián influirá en hombres y mujeres de los siglos XX y XXI, y las historias personales de éstos. Toca también las dificultades de la liberación de la mujer dentro de la religión islámica, los errores debidos al fanatismo de las religiones, el influjo de la religión-herejía cátara en la actualidad, la postura y actuación de la Iglesia Católica ante determinados temas, el nazismo, la II guerra mundial, el terrorismo etarra, la terrible guerra serbio-bosnia, el creciente problema de la inmigración en Europa, etcétera. En fin, parece que fuera a ser su última novela y hubiera querido alcanzarlo todo. No obstante, repito, el argumento no es farragoso, tiene sentido y está bien armado, por fantasioso que sea.

Es recurrente ya en sus libros el tema de una organización internacional secreta constituída por hombres ricos y poderosos que manejan el mundo desde la penumbra, provocando guerras, deponiendo gobiernos y alzando mandatarios a placer con el fin de acumular más poder y más riqueza.

Con los personajes también me ha sorprendido. Los ha creado reales y se los ha trabajado. Curiosamente, ha perfeccionado y profundizado más en las personalidades masculinas que en las femeninas, a las que ha dado menos matices. Ramón de Perelha, Pierre- Roger de Mirepoix, Hugues de Arcis y otros son personajes que existieron realmente y vivieron el momento contado, otros solamente están basados en personajes que existieron, y los hay absolutamente inventados. En cualquier caso, se ha basado en hechos reales de la historia lo que es de agradecer en una novela con tintes históricos.

El final es curioso y no parece, como en sus otras novelas, que estuviera deseando acabar y no supiera bien cómo hacerlo. En resumen, es un libro con pretensiones, recomendable para pasar ratos entretenidos, y la historia que cuenta engancha.

“Donde no vale la bendición prevalecerá la estaca. Excitaremos contra vosotros a príncipes y prelados, y estos convocarán a naciones y pueblos”.

Domingo de Guzmán, en el futuro Santo Domingo

Descargar “La Sangre de los Inocentes”, de Julia Navarro en pdf

2 comentarios:

  1. Pues ya veo que te lo has leido y piensas lo mismo que yo, que es la mejor de las tres

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  2. Fectivamente

    Lo dicho, un placer tenerte por aquí. Te aseguro que normalmente respondo antes, de nuevo y por última vez, disculpa el retraso en responder.

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